Fallas Graves en la Escuela Municipal N°1 de Lautaro: Denuncian incumplimiento de Leyes Laborales y de Salubridad
La Escuela Municipal N°1 de Lautaro se encuentra en el centro de una grave crisis sanitaria, después de que los profesores y asistentes denunciaran fallos graves en el servicio sanitario del establecimiento, lo que es un incumplimiento flagrante de las leyes laborales y de salubridad, lo que pone en riesgo la salud y seguridad de toda la comunidad educativa.
Según fuentes cercanas al establecimiento, el sistema sanitario de la Escuela comenzó a presentar fallas en abril, lo que produjo la clausura de los tres servicios sanitarios.
A pesar de las promesas de solución por parte del Departamento de Administración de Educación Municipal (DAEM), la situación sigue sin resolverse.
«La falta de acción por parte del DAEM y la Municipalidad de Lautaro es inaceptable. Los profesores y asistentes no pueden trabajar en condiciones insalubres y peligrosas», declaró un apoderado del establecimiento.
La situación está provocando problemas de salud entre los funcionarios, incluyendo trastornos asociados como rotavirus, cistitis e infecciones urinarias.
Los profesores y asistentes han expresado su negativa a trabajar en estas condiciones, debido a que vulneran sus derechos laborales.
La responsabilidad del Municipio
No es un misterio que la responsabilidad administrativa de estas graves fallas de salubridad en la Escuela Municipal N°1 de Lautaro recae en el Alcalde Ricardo Jaramillo y el Jefe del DAEM, Edison Tropa.
«Deben tomar medidas inmediatas para solucionar este problema», enfatizó una apoderada del recinto educacional.
Además, un equipo de El Diario de La Araucanía se trató de comunicar con el Encargado DAEM del municipio, Edison Tropa Sandoval, pero este se encuentra utilizando sus días de vacaciones en Europa, por lo que nos fue imposible contar con una declaración de él para esta noticia.
Por su parte, el Concejal y presidente de la Comisión de Educación y Finanzas del municipio local, Germán Ortiz, explicó que “este problema afecta directamente también porque soy apoderado del establecimiento, es una situación bastante compleja pero el alcalde Jaramillo me explicó que suspendieron las clases el día viernes para retomar el día lunes”.
“Sin embargo, es necesario citar a una reunión de la Comisión para que el alcalde, el encargado DAEM o quién se designe, entregue explicaciones necesarias sobre las anomalías y las situaciones que ocurriendo, que puedan explicar también los riesgos a los que estuvieron expuestos los estudiantes y cómo prevenirlos en el futuro”, aclaró la autoridad.
La respuesta de la Superintendencia de Educación
El caso ya es de conocimiento público y la Superintendencia de Educación reacción y aseguró en un Comunicado oficial que “esta denuncia será investigada con prioridad y el establecimiento educacional será fiscalizado próximamente para constatar si cumple con las condiciones que exige la normativa”.
“Recordemos que todos los recintos educativos deben contar con condiciones mínimas de infraestructura, higiene y salubridad para poder funcionar. Se considera que éstas son deficientes cuando no permiten el desarrollo de las actividades escolares o docentes en forma apropiada, o se pone en riesgo la integridad física o la salud de las y los estudiantes y personal”, agrega el texto.
Respecto de las posibles sanciones el Comunicado es claro y puntualiza que “para quienes incumplan estas condiciones varían de acuerdo a la gravedad y el riesgo que generan a la comunidad educativa, pudiendo ir desde una amonestación o multas en UTM, hasta la suspensión -temporal o definitiva- de la subvención y la inhabilidad para mantener la calidad de sostenedor”.